Implantología Implantología

Solución para

Reponer dientes ausentes y recuperar su función y su estética natural, mediante raíces artificiales de titanio. Pueden sustituir una, varias o incluso todas las piezas dentales.

Se produce un proceso de oseointegración, que consiste en la íntima conexión entre el implante dental y el hueso del paciente. El éxito de este procedimiento depende, en gran parte, de una correcta realización de la técnica quirúrgica, del diseño del implante, de la ausencia de procesos o reacciones inflamatorias durante el procedimiento y del tiempo en el que el implante es mantenido libre de cargas (esto es alrededor de 3 meses mínimo).

Técnicas

Carga inmediata

Consiste en colocar el implante y la corona (o funda) en la misma intervención. Esta técnica permite, por ejemplo, que en un solo día se realice la extracción de un diente fracturado insalvable, la colocación del implante (o raíz artificial) y una corona (el diente) provisional que reemplaza la pieza dental pérdida. Esta corona permite que el paciente no se vea “sin dientes” durante el período de integración del implante (unos 3 meses). Pasado este tiempo, se coloca la corona definitiva de porcelana o zirconio que presenta unas altísimas características estéticas, de forma que no se pueden identificar diferencias entre la corona y los dientes naturales del paciente.

Implantes inmediatos

Se trata de la colocación de un implante en la misma intervención en que se hace la extracción del diente. La diferencia con la técnica convencional, es que antes se hacía la extracción del diente y se debía esperar unos meses para que el hueso se regenerara o “cicatrizara” y posteriormente colocar el implante. Por lo tanto, esta técnica permite reducir el tiempo total del tratamiento. Muchas veces, además de la colocación inmediata del implante, podemos realizar carga inmediata y colocar una corona, “un diente”, en la misma sesión.

Carga directa

Implante 1

Implante 2

Implante 3

Implante 4

Implante 5